El término "políticamente correcto" apareció a principios de la década de los noventa en el contexto norteamericano.
El periodista del New York Times, Richard Bernstein, reportó el término como una justificación a las “investigaciones” que los estudiantes de la Universidad de Texas comenzarían a hacer en 1990. Dichos trabajos “investigativos” comenzaron a ser promovidos en dicha universidad con el afán de "acercar a los estudiantes a la realidad cotidiana".
Los asuntos a los cuales se les calificó de políticamente correctos (p. c.) estaban relacionados con los intereses de los grupos minoritarios en los Estados Unidos: homosexuales, chicanos, afrocaribeños, latinos, feministas, lesbianas, etc. Pronto se amplió el abanico hasta abarcar: diferencias culturales, ecologismo, racismo, discriminación, defensa de los grupos guerrilleros latinoamericanos (especialmente centroamericanos), etc. Sumando, por supuesto, frontales ataques a lo que se denominó la “supremacía” blanca u occidental.
Entonces se puso de moda la defensa de la homosexualidad y la condena a los valores morales occidentales, por ser políticamente correcto. Condenar al sistema de mercado y defender el terrorismo palestino, por ser políticamente correcto. Condenar a las empresas trasnacionales y defender a la guerrilla guatemalteca por ser políticamente correcto. Hoy se ha vuelto una moda ensalzar al dictador Hugo Chávez en las Universidades estatales norteamericanas por considerarse políticamente correcto.
El término acuñado por el estalinismo en su momento reflejó le hegemonía del pensamiento oficial único, en la ex Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas. Hoy en día lo “políticamente correcto” no es sino la imposición (excusándose en uno de los valores occidentales, que tanto rechazan las p. p. c.=personas políticamente correctas, como es la tolerancia) de intereses particulares violentando los derechos de los demás. Promover los intereses particulares utilizando los recursos generados por el trabajo y la productividad de los demás. Y lo que es peor: sacrificar el trabajo científico y la búsqueda de la verdad en el altar de un relativismo asqueante.
El pensamiento “políticamente correcto” no es otra cosa sino la manifestación de un nuevo fascismo que comienza por silenciar la crítica e impedir el debate. Porque discutir los asuntos que han caído bajo la sombrilla de la “corrección política” se tornan tabú. Peor aún, se torna criminal. Criminal debido a que los grupos promotores de lo “políticamente correcto” han logrado que sus visiones se tornen patrocinen leyes como la que me impide a mí vedar la entrada de una persona a mi restaurante si lleva un traje que considero inapropiado para el lugar. ¡Discriminación! ¡Racismo! Ya no es libertad de entablar una relación contractual sino discriminación. Ya no es libertad para abrigar sentimientos sino racismo. Y en este contexto lo peor es que se trata de un negocio privado en el cual es el dueño quien se arroga para sí el derecho de admisión. Pero los políticamente correctos creen que los restaurantes son lugares públicos. ¡Qué ceguera! ¡Qué confusión terminológica y de planos de la realidad!
Es indudable que el pensamiento “políticamente correcto” es ajeno al estado de derecho y dondequiera ha asentado sus reales ha provocado, digamos, un liberticidio. Pensemos detenidamente: ¿No es la prevalencia del estado de derecho la única condición para que los seres humanos convivamos en paz, en armonía, en cooperación a pesar de nuestras múltiples diferencias?
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- Dr. De León Barbero
- Profesor residente de Filosofía Social, Universidad Francisco Marroquín. Guatemala, Centro América.
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3 comentarios:
Ciertamente que lo PC distrae la atención y desvía de lo verdaderamente: el respeto a los derechos individuales de todos; y la igualdad de todos ante la ley. Saludos
Dr. De Leon Barbero
Me he sentado esta tarde en el escritorio para darle un vistazo a su pagina , dejeme contarle, soy su fan , le escucho casi todos los lunes ( en el programa de MY ) y es encantadora la forma en que explica y mantiene el dialogo , sencillamente extraordinaria la manera en que hace llegar el mensaje al oyente.
Saludos cordiales ,
Carolina
PD. no se si llegaran dos comentarios , pero la primera vez lo intente y la pagina caduco, si es asi , me disculpo.
Gracias Carolina por el comentario dejado en mi Blog. Es obvio que no soy un blogger muy apasionado porque dejo muchos días sin colocar novedades y sin leer lo que amablemente me escriben.
Aprecio su gentileza y trataré de seguir compartiendo con personas como usted lo que he aprendido, lo que me en su momento me enseñaron mis maestros y los libros que he leído.
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